Trastornos Psicóticos
En este tipo de alteración la persona pierde en algún grado el contacto con la realidad, bien porque percibe estímulos inexistentes para los demás (alucinaciones auditivas o visuales), bien porque la percepción está distorsionada, interpretando los hechos de un modo delirante (creer que te persiguen o que traman un complot en tu contra, creer poseer poderes paranormales, interpretar sucesos como señales de ser el elegido o elegida para algún plan divino, etc.).
La esquizofrenia es la condición más grave, se considera enfermos a las personas que padecen este trastorno, se caracteriza por alucinaciones, pensamiento muy perturbador, pensamiento desorganizado y en ocasiones puede haber ataques de risa inesperados, manía persecutoria y otros delirios. También suelen haber algunos de síntomas negativos (cuando el paciente deja de hacer algo normal) como apatía, falta de interés o iniciativa, depresión, ausencia de respuesta emocional o catatonia (inmovilidad prolongada).
En el trastorno delirante el síntoma más destacado son las creencias delirantes.
Según la gravedad y duración del cuadro se considera que la psicosis es transitoria y que no tiene porqué repetirse o bien se trata de una afección crónica que requiere tratamiento a largo plazo, tanto farmacológico como terapia psicológica.
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